
Un estudio científico de 1992, es decir, de hace más de treinta años, señalaba que las dunas litorales son medios originales tanto desde el punto de vista de su geomorfología como de la vegetación y fauna que sustentan. En Chile ocupan una superficie importante, constituyendo un recurso paisajístico de interés. El conocimiento del modo de evolución de las dunas es de gran importancia, ya que el hombre hace uso de estos espacios, desencadenando a veces procesos irreversibles de transformación. Es imprescindible, señalaba el estudio, monitorear los campos dunarios y tomar decisiones en relación a su manejo. El año 1992.