
Iquiqueñas deportistas de disciplinas minoritarias, con el apoyo de sus familias, han logrado forjar sus carreras con esfuerzo y sacrificio, a pesar de las dificultades. Haz clic o toca la portada para ver todas las páginas de la revista.

Iquiqueñas deportistas de disciplinas minoritarias, con el apoyo de sus familias, han logrado forjar sus carreras con esfuerzo y sacrificio, a pesar de las dificultades. Haz clic o toca la portada para ver todas las páginas de la revista.

El Club Deportivo La Cruz cumplió cien años y sus actividades de celebración se han sucedido una tras otra. Hace poco se presentó un libro que rescata lo mejor de su historia. Su autor, presidente del Club y sociólogo, nos invita a dar una vuelta por el barrio en este artículo. Que cien años no es nada.

Cada domingo al mediodía, cerca de treinta socios de la Academia de Educación Física se reúnen para buscar acuerdos, gestionar instancias y navegar entre los recuerdos y pasiones deportivas que resguardan las altas paredes del emblemático edificio. Ad portas de conmemorar su centenario, sus socios se preparan convocando a la comunidad a hacerse parte de este acontecimiento histórico.

Esta Ingeniera en Biotecnología, Magister en investigación farmacológica y Doctora en fisiología y farmacología, de la Universidad Autónoma de Madrid, vibra con la investigación. Y admite que llegó a la ciencia casi por casualidad.

El desierto y la Antártica pueden parecer opuestos, pero para la científica iquiqueña, doctora en Ciencias Biológicas, mención en Microbiología, ambos territorios comparten una misma esencia: la resistencia. Desde los microorganismos que sobreviven a condiciones extremas hasta las mujeres que abren camino en espacios académicos, su historia combina investigación, arraigo y una mirada crítica sobre cómo se construye la ciencia desde contextos adversos.

En el colegio, Karem Arriaza, disfrutaba la biología y la química. Así es como llegó a estudiar biotecnología en la Unap y posteriormente a seguir una carrera que le apasiona. Hacer ciencia en la región donde nació ha sido su apuesta.

Esta Psicóloga y Doctora en Educación y Sociedad de la Universidad de Barcelona, desde la carrera de Educación Parvularia, Mención Inclusión, ha dedicado más de dos décadas a la formación inicial docente, vinculando su práctica con la pedagogía dialógica, la justicia social y la construcción de comunidades de aprendizaje en Tarapacá.

Las fronteras y toda la movilidad humana en torno a éstas han sido por años el motivo de estudio de Marcela Tapia Ladino, doctora e investigadora, actualmente en la sede de Iquique de la Universidad de Tarapacá, UTA. Integró por varios años el Instituto de Estudios Internacionales, INTE, de la UNAP, como directora del Doctorado en Estudios Transfronterizos del mismo instituto, donde fue fuente de consultas en todo lo relacionado a la migración.