Ciencia en Vivo y en directo: el caso del asteroide que ahora podría impactar la luna

Hace unas semanas, NASA ajustó el riesgo de impacto a solo 0,0017%, y la Agencia Espacial Europea (ESA) lo estimó en 0,002%. En otras palabras, la probabilidad de que el asteroide pase de manera segura cerca de la Tierra es casi 100%.

Ciencia y Medio Ambiente30/05/2025 Makarena Estrella (*) y Alejandro Clocchiatti (**)
Foto luna 1 1080p

A fines de enero, mientras muchos disfrutábamos del verano tratando de ignorar las malas noticias, el universo nos sorprendió con la aparición de un asteroide potencialmente peligroso – el 2024 YR4 – que podía impactar la Tierra el 22 de diciembre de 2032. A diferencia de tantas noticias que vemos sobre objetos que nos pasan cerca, el caso de 2024 YR4 era serio: las agencias espaciales le asignaron un 3 en la escala de Turín (que clasifica entre 0 y 10 el peligro de impacto de un objeto cercano a la Tierra, o NEO por sus siglas en inglés), con una probabilidad de impacto del 1,2%. En términos astronómicos eso era preocupante.

El 4 de febrero, la probabilidad de colisión aumentó al 2% y la ONU activó por primera vez el "Protocolo de Seguridad Planetaria". Pocos días después la probabilidad subía al 3%. El diario El País titulaba: “El riesgo de impacto del asteroide 2024 YR4 es ya el mayor jamás pronosticado”. A esas alturas, aparecieron los memes acerca de si valía la pena seguir pagando el dividendo o la tarjeta de crédito, ya que para el 2032 no faltaba tanto.

Sin embargo, hace unas semanas, NASA ajustó el riesgo de impacto a solo 0,0017%, y la Agencia Espacial Europea (ESA) lo estimó en 0,002%. En otras palabras, la probabilidad de que el asteroide pase de manera segura cerca de la Tierra es casi 100%.

 

CIENCIA EN DESARROLLO

 

¿Las agencias espaciales y los medios jugaron con nuestros sentimientos? La verdad es que no. Lo cierto es que como pocas veces fuimos testigos de ciencia en desarrollo. Estamos acostumbrados a ver el resultado final de años de trabajo, obviando el camino que hay detrás de los avances científicos, pero en este caso tuvimos ante nuestros ojos, en tiempo real, tanto el desarrollo de la ciencia como la reacción de quienes la comunican. 2024 YR4 nos brinda, entonces, la oportunidad de entender mejor cómo ubicarnos frente a la interacción entre ciencia y periodismo.

Vamos a los datos. 2024 YR4 fue descubierto desde Chile, con el telescopio ATLAS-4 que es parte del Sistema de Última Alerta de Impacto Terrestre de Asteroides (ATLAS por sus siglas en inglés). ATLAS fue concebido por astrónomos de la Universidad de Hawaii y financiado por la NASA. ATLAS-4 fue instalado y opera desde nuestro país con el apoyo del Instituto Milenio de Astrofísica, financiado por ANID. El asteroide mide entre 40 y 90 metros. Si colisionara con la Tierra probablemente explotaría en el aire por el choque con la atmósfera, como el evento de Tunguska, y sería trágico si ocurriera en una zona poblada.

Pero ¿por qué nos sorprende tanto que el pronóstico de colisión se haya ajustado tantas veces y tan rápido? Eso tiene que ver, por un lado, con que se nos olvida con frecuencia que la ciencia, como todo proceso humano, es lenta, acumulativa, y constantemente se va sobreescribiendo. Y por otro lado que la difusión de la ciencia implica en primera instancia, la transformación de la misma en algo noticioso. Lo que no supimos en el caso de 2024 YR4, es que conocemos bien cómo calcular la órbita de un cuerpo menor del Sistema Solar, pero la precisión de la predicción de las posiciones futuras depende de la extensión y calidad de los datos previos disponibles.

 

Entre el descubrimiento, a fines de diciembre, y principios de febrero, los astrónomos pudieron calcular una órbita preliminar del asteroide. Esa órbita predice las posiciones futuras con una precisión que decrece progresivamente hacia tiempos más lejanos.

OVOIDE ALARGADO

 

Entre el descubrimiento, a fines de diciembre, y principios de febrero, los astrónomos pudieron calcular una órbita preliminar del asteroide. Esa órbita predice las posiciones futuras con una precisión que decrece progresivamente hacia tiempos más lejanos. Aplicando el cálculo hasta el acercamiento de diciembre de 2032, la ubicación probable de 2024 YR4 resultaba no un punto en el espacio, sino un ovoide alargado. Como la Tierra quedaba dentro de ese ovoide había una cierta probabilidad de colisión.

¿Podía ocultarse ese resultado? ¡No! Incluso por consideraciones éticas. Con el correr del tiempo, tuvimos más observaciones y el volumen del ovoide donde podía estar 2024 YR4 disminuyó. Al principio la Tierra todavía quedaba adentro, por lo que la probabilidad de colisión aumentó. Finalmente, con la acumulación de observaciones, el ovoide se hizo tan pequeño que la Tierra quedó afuera, y la probabilidad de colisión pasó a ser casi 0.

La difusión inicial de los resultados por los astrónomos abrió el juego a su contraparte: quienes comunican la ciencia. El lado agradable es que la ciencia nos despierte el interés, que esté cada vez más presente en los medios, y que en Chile sigamos profundizando nuestra relación especial con la astronomía. Pero cuando la ciencia se hace noticia hay parámetros no científicos que comienzan a tener relevancia. Para ser tal, una noticia tiene que destacarse, llamar la atención.

 

TRIVIALIZACIÓN

 

Quienes comunicamos ciencia, ya sea desde la divulgación o desde la academia, somos parcialmente responsables, entonces, de las sorpresas y decepción del público. Pero hay más. Como señala Dorothy Nelkin, en su libro “Selling Science. How the Press covers science and Technology” el tratamiento de la ciencia en los medios hace que científicas y científicos sean vistos como villanos o como héroes, capaces de hundir o salvar el mundo.

Esta dualidad conlleva expectativas poco reales de lo que la ciencia y sus especialistas realmente son. La ciencia no es abstracta ni pura, ni ajena a las emociones o frustraciones de quienes la realizan. Los profesionales de la ciencia compiten entre sí por recursos y atención del público, y también por lo tanto de quienes comunicamos ciencia. Así, el público está inmerso en un mar de magisterios e intereses que no conoce bien, cuyas tensiones distorsionan lo que sería una aproximación más sensata al conocimiento del mundo en el que vivimos.

(*) Comunicadora científica - miembro de ACHIPEC

(**) Astrónomo MAS – UC

 

 

 


 

El asteroide que podía impactar

la Tierra amenaza ahora a la Luna

 

El asteroide que durante algunas semanas se temió que impactara contra la Tierra tiene ahora casi un 4% de probabilidades de chocar contra la Luna, según nuevos datos del telescopio espacial James Webb. Se estima que el asteroide, de unos 60 metros y capaz de destruir una ciudad, estableció un nuevo récord en febrero al tener la mayor probabilidad que los científicos jamás habían medido —3,1%— de impactar la Tierra. Una serie de observaciones posteriores acabaron por descartar que el asteroide —denominado 2024 YR4— impacte contra la Tierra el 22 de diciembre de 2032. Sin embargo, las probabilidades de que se estrelle contra el satélite terrestre han estado aumentando constantemente.

Te puede interesar
Glaciar 2 1080p

Mensaje de la directora general de la Unesco con motivo del Día Mundia de los Glaciares (*)

Ciencia y Medio Ambiente27/05/2025

Este año el Día Mundial del Agua se centra en la preservación de los glaciares. La Unesco y la Organización Meteorológica Mundial son los organismos de las Naciones Unidas que lideran la celebración. Los glaciares sirven como reservorios naturales de agua dulce, que liberan agua de deshielo que sustenta el suministro de agua potable, la agricultura, la industria y los ecosistemas saludables.

230126 Pisagua OCEANA Fernando Olivares

Mar de Pisagua : estrenarán cortometraje filmado en la primera área marina protegida de Tarapacá

Ciencia y Medio Ambiente26/05/2025

Durante mayo, NTV mostrará material exclusivo registrado en el área protegida, el que será replicado en las redes sociales del canal y de la organización de conservación marina Oceana. Las piezas son narradas por el apneísta nacional Sebastián Lira, quien pudo nadar en estas aguas, y conocer en primera persona la enorme riqueza de este tesoro escondido en el norte grande.

cambio 1

Más de 100 investigadores se reúnen para sustentar con evidencia científica las metas de Chile frente al cambio climático

Ciencia y Medio Ambiente14/05/2025

El Acuerdo de París compromete a todos los países a hacer compromisos específicos para enfrentar el cambio climático y mantener la temperatura global media bajo los 2°C y hacer esfuerzos para limitarlo a 1,5°C. Este aporte es conocido como “Contribución Determinada a Nivel Nacional” (NDC). En su revisión y actualización periódica colabora el Comité Científico Asesor de Cambio Climático, que logró convocar a un centenar de investigadores para complementar su visión y ponerla a disposición del Ministerio de Medio Ambiente.

cactus 2

Cómo un cactus chileno se convirtió en el centro de inédita operación policial en Italia

Sofia Quaglia (*)
Ciencia y Medio Ambiente11/05/2025

El caso se denominó Operación Atacama y se ha convertido en una de las investigaciones sobre operaciones ilegales con cactus más grandes hasta la fecha en Europa. Como resultado, el gobierno italiano inició un proceso contra Andrea Piombetti y su cómplice en 2020 por violar la convención Cites. El juicio duró cinco años, finalizó en enero de 2025 y dio lugar a muchas novedades en la historia de los delitos contra la biodiversidad.

surgencia 1

A propósito de las ballenas en Iquique, el fenómeno de la Surgencia: radiografía al movimiento del mar

Joseph Julca Mendoza
Ciencia y Medio Ambiente08/05/2025

Chile es conocido a nivel mundial por tener uno de los ecosistemas marinos más productivos, donde las pesquerías son ampliamente apreciadas por su riqueza y diversidad. Esto se da gracias a un fenómeno oceanográfico que ocurre principalmente a lo largo de las costas de África del sur, noroeste de África, oeste de Estados Unidos y Chile-Perú. Estamos hablando del fenómeno de surgencia o afloramiento, que consiste en el ascenso a la superficie de masas de agua profundas -que son frías y ricas en nutrientes-, debido al movimiento de aguas superficiales mar adentro.

Amonites 1

Chile y su legado fósil marino: huellas del pasado que revelan la historia de nuestros océanos, desafíos de conservación y últimos descubrimientos

Tamara Núñez (*)
Ciencia y Medio Ambiente06/05/2025

Chile es un país excepcionalmente rico en fósiles marinos, testigos de un pasado en el que gran parte de su actual territorio estuvo cubierto por océanos. A lo largo y ancho del territorio nacional, estos vestigios revelan la evolución de los ecosistemas marinos y aportan claves fundamentales para comprender la evolución de la vida en el planeta y los efectos del cambio climático. Sin embargo, su estudio y conservación enfrentan grandes desafíos. En este reportaje, exploramos la historia geológica de Chile, los hallazgos más recientes y el rol clave de la paleontología en la protección de este invaluable patrimonio.

reverdecer 1

Cuando los desiertos reverdecen: ¿Solución o Amenaza Ambiental?

Bastian Gygli (*)
Ciencia y Medio Ambiente04/05/2025

En las últimas décadas, la desertificación ha sido considerada uno de los mayores desafíos ambientales a nivel global. Este proceso implica la degradación de los suelos y los ecosistemas, particularmente en áreas áridas y semiáridas, y tiene un impacto profundo en la biodiversidad, la seguridad alimentaria y las economías de diversas regiones del mundo.

Lo más visto
Portada Horizontal para TI (1)

Revista Tarapacá Insitu Edición 73

Ediciones Insitu25/05/2025

Proyecto de virtualización del único santuario inca de altura costera permitió, entre otras cosas, la reconstrucción digital de los rostros de las doncellas, desarrollada a partir de tejidos blandos conservados, referencias históricas y principios forenses. 03-04-05

230126 Pisagua OCEANA Fernando Olivares

Mar de Pisagua : estrenarán cortometraje filmado en la primera área marina protegida de Tarapacá

Ciencia y Medio Ambiente26/05/2025

Durante mayo, NTV mostrará material exclusivo registrado en el área protegida, el que será replicado en las redes sociales del canal y de la organización de conservación marina Oceana. Las piezas son narradas por el apneísta nacional Sebastián Lira, quien pudo nadar en estas aguas, y conocer en primera persona la enorme riqueza de este tesoro escondido en el norte grande.