ESTADO DE BIENESTAR: UNA ALTERNATIVA PARA CHILE

Al calor de la refriega electoral de estos días y a las conversaciones en torno a una nueva Carta Magna, “El Estado de bienestar” surge como un paradigma que podría orientar el debate y encauzar las políticas que desemboquen en un Chile mejor, más solidario y más justo. Según distintos analistas, ello constituiría un paso significativo para enfrentar las profundas causas que llevaron al “estallido social” y contribuiría a la paz social y la pronta recuperación de la actividad económica del país. Este artículo nos permite atisbar el horizonte al que podríamos llegar.

Actualidad28/09/2021 Iván Valenzuela (*)
bienestar 3

Las sociedades democráticas avanzadas, en décadas recientes, han descubierto que un conjunto de políticas económicas y sociales se traducen en un círculo virtuoso entre dinamismo económico, participación ciudadana democrática y bienestar social. Ahora, asimismo, se constata que ese conjunto de políticas e instituciones permiten de mejor forma llevar a cabo la transición ecológica exigida por el calentamiento global y la revolución tecnológica.

El Estado de Bienestar es una auténtica colaboración entre sector público y privado para dar dinamismo a la economía y los mercados. Los incentivos para la propiedad privada y la empresa coexisten con instituciones y regulaciones públicas que velan por el bien común, así como por innovaciones científicas y tecnológicas que abran paso a los negocios del futuro. 

Los Estados de Bienestar más avanzados se encuentran entre las economías más competitivas del mundo, según el Foro Económico Mundial. Pensiones, educación, salud y protección social son pilares de la política social por parte del Estado de Bienestar, exhibiendo como columna vertebral programas universales y públicos. En torno a dicha columna hay programas específicos donde participan privados y actores de la sociedad civil, especialmente en materia de pensiones.

bienestar 2

El Estado de Bienestar promueve la autonomía de la sociedad civil y con ello de la democracia. Nueva Zelanda, Australia y Gran Bretaña cuentan con una forma de Estado de Bienestar liberal. Alemania y Europa central, por su parte, con uno de carácter corporativista. Los países europeos del mediterráneo han desarrollado un Estado de Bienestar entrecruzado con sus estructuras de familia. Finalmente, la socialdemocracia escandinava generó un tipo de Estado de Bienestar asentado en el cultivo del talento, la educación y las capacidades de la ciudadanía. Cada forma de Estado de Bienestar responde a las características de su respectiva sociedad.

Ante los desafíos que enfrenta el Chile de hoy, resulta altamente llamativo el caso escandinavo. Se debe subrayar que el Estado de Bienestar nórdico, además de dar importancia a las transferencias directas a las personas, coloca en el centro la existencia de servicios públicos que promueven las capacidades humanas: jardines infantiles, educación en todos sus niveles, educación de adultos, sistema formativo, bibliotecas públicas y servicios de salud. Tales programas pueden ser estudiados perfectamente para su eventual adaptación en Chile, según nuestras características y necesidades. Al poner en el centro las capacidades de la ciudadanía y la fuerza de trabajo, se incrementa el capital humano y el talento. 

“Los incentivos para la propiedad privada y la empresa coexisten con instituciones y regulaciones públicas que velan por el bien común, así como por innovaciones científicas y tecnológicas que abran paso a los negocios del futuro”.

Esta es la piedra angular de la innovación tecnológica, empresarial y social. Bajo esta fórmula, se puede garantizar al mismo tiempo derechos sociales, participación democrática y una economía dinámica en el tiempo. Por supuesto, estas profundas reformas para avanzar hacia el Estado de Bienestar toman décadas en mostrar sus resultados.

Paralelamente, del modelo alemán y de Europa central se puede destacar, como algo de sumo interés para Chile, su sistema de relaciones laborales en el que los representantes del mundo sindical y empresarial pactan condiciones relativas a procesos de producción, salarios, robotización y automatización, entre muchos otros factores de vital importancia para la actividad económica y empresarial.

El modelo de competencias para el trabajo y la educación en nuestro país tiene mucho que aprender de la experiencia con que cuentan en Alemania y Europa central. La experiencia en cuestión se sustenta en el diálogo social auspiciado por el Estado de Bienestar. 

“El modelo de competencias para el trabajo y la educación en nuestro país tiene mucho que aprender de la experiencia con que cuentan en Alemania y Europa central”.

Del mismo modo, el proceso político-administrativo, de descentralización y regionalización, que está teniendo un impulso importante en Chile actualmente, también puede remitirse a las valiosas lecciones que arroja el destacado papel de municipios y regiones en Europa, dando cuenta de gran capacidad de autonomía y experticia para determinar su futuro en la toma de decisiones para el desarrollo productivo, económico y social. Desarrollo del cual participan muy activamente las pequeñas y medianas empresas de las economías locales y regionales.

En suma, el Estado de Bienestar es una plataforma potente para lograr que la ciudadanía y la fuerza de trabajo, de Chile, puedan tener en el futuro los más altos estándares de educación y formación, disfrutando con ello de una óptima salud pública física y mental.

Es esta apuesta de la sociedad toda por el talento y la creatividad, que no deja a nadie fuera, la que permitirá proyectar enérgicos programas de desarrollo multidimensional para las próximas décadas en nuestro país. En pocas palabras, los derechos que serán consagrados en la nueva Constitución, en la medida que vayan acompañados de un moderno Estado de Bienestar, anclado en nuestra realidad, podrán contar tanto con una democracia pujante, en constante mejora, como con un a economía y mercados que redunden en riqueza y bienestar para el conjunto del país.


(*) Sociólogo, Universidad Arturo Prat.

bienestar 1

Te puede interesar
alimentos 1

Políticas públicas en Chile encaminadas a disminuir el desperdicio alimentario

Sofía Bustos
Actualidad04/04/2024

El hambre y la inseguridad alimentaria a nivel global están aumentando. Sin embargo, aproximadamente un tercio de todos los alimentos producidos se pierden o se desperdician. Todos tenemos un papel que desempeñar en la reducción de la pérdida y el desperdicio de alimentos. El pasado 30 de marzo se conmemoró el Día Mundial Cero Desechos.

Nota Pesca 1

PROTESTAN por actividad pesquera en la primera milla de naves semi industriales

Actualidad25/03/2024

Una singular manifestación realizó un grupo de pescadores artesanales y también quienes practican la pesca de orilla el pasado domingo 24 de marzo, con el objetivo de presionar a las autoridades políticas para que introduzcan modificaciones a la actual Ley de Pesca. La idea es impedir que las naves semi industriales sigan extrayendo recursos de la primera milla marina, los que luego son derivados a la industria pesquera, burlando (con un resquicio legal) el espíritu de la ley.

derecho vivienda propuesta constitucion 1

VIVIENDA DIGNA: el derecho que la nueva Constitución incorpora por primera vez en Chile

Diego Rebolledo Flores
Actualidad27/08/2022

Hoy en Sudamérica son solo tres los estados independientes que no tienen consagrado el Derecho a la Vivienda en sus constituciones: Surinam, Perú y Chile. Y son cada vez más estados en el mundo los que avanzan a definir dentro de sus cartas fundamentales derechos como el de la vivienda, u otros, definidos dentro de los que se conocen como derechos de segunda generación.

Lo más visto
Portada Horizontal para TI

Revista Tarapacá Insitu Edición 67

Ediciones Insitu10/11/2024

La tragedia que supone la destrucción de la Parroquia de San Antonio de Padua debe ser un recordatorio urgente de la fragilidad del patrimonio y de la necesidad de actuar antes de que sea demasiado tarde. Esta pérdida no debe quedar en vano. 03-05

IMG_9633

A propósito de un incendio: Patrimonio de Tarapacá, riesgos y reflexiones pendientes

Bernardo Dinamarca (*) y Jenniffer Quiroz (**)
Arquitectura y Patrimonio15/11/2024

El incendio que afectó a la Iglesia de San Antonio de Padua de la orden franciscana de Iquique sólo fue el epílogo de la tragedia de despreocupación y desvalorización generalizada del Patrimonio de Tarapacá, que sigue desapareciendo sin mediar un conjunto de acciones mínimas necesarias para prevenir, en este caso el alto riesgo de incendio que está a la vuelta de cada esquina de la arquitectura de madera de la ciudad de Iquique.